Casa de paja

Una buena construcción con balas de paja  puede ahorrar hasta un 75% en costos de calefacción y refrigeración. De hecho, en la mayoría de los climas, no es necesario la instalación de aire acondicionado para mantener la casa fresca durante todo el verano, incluso en un clima mediterráneo como el de Mallorca. Con este tipo de construcción se ahorra dinero y recursos naturales.

Las paredes construidas con balas de paja proporcionan un excelente aislamiento acústico al tener una absorción acústica superior en comparación a los materiales tradicionales. Esto será especialmente importante en los hogares de la ciudad y entornos urbanos donde la contaminación acústica es mayor.

Aunque pueda parecer extraño las casas de balas de paja tienen aproximadamente tres veces más de resistencia al fuego que las casas convencionales. La paja de las balas debido a su compactación contienen muy poco oxígeno y por lo tanto son resistentes a la combustión. Además al estar cubiertas con un mortero esta propiedad es aún mayor.

Un edificio construido con paja ayuda a la sostenibilidad del planeta de muchas maneras. Por ejemplo, la paja es un producto de desecho que se queman o se composta en el agua estancada. Mediante el uso de la paja en lugar de eliminarla, reducimos o bien la contaminación del aire o el consumo de agua, dos factores de impacto en la conservación del medio ambiente. No hace falta mencionar que el agua es uno de los recursos naturales que más debemos proteger en Mallorca.

El uso de la paja como aislante significa que los materiales de aislamiento estándar se eliminan de la casa. Los aislamiento de fibra de vidrio estándares suelen contener formaldehído un conocido carcinógeno. Mientras que otros aislantes basados en madera contrachapada contienen colas que pueden desprender gases residuales en la casa a través del tiempo.